Cómo evitar los efectos del calor en los enfermos de hipertensión pulmonar 3
El verano es una época en la que las personas que padecen algún tipo de patología crónica que dificulta la tolerancia del cuerpo al calor deben tener un cuidado especial. Por este motivo, desde nuestra Fundación queremos ofrecer algunos consejos para reducir los efectos del calor en los enfermos de hipertensión pulmonar, ya que los síntomas de esta enfermedad pueden agravarse por una excesiva exposición a las altas temperaturas y al sol, llegando a agotar excesivamente al paciente o incluso provocándole una deshidratación.
Consejos para evitar el calor durante estas fechas
Aquí te mostramos las principales recomendaciones que cualquier persona, y principalmente aquellas que padecen una enfermedad grave como la hipertensión pulmonar, deben tener en cuenta. Para elaborarla nos hemos apoyado en los recursos proporcionados por la Pulmonary Hypertension Association de Estados Unidos, aunque siempre te recomendamos que consultes con tu doctor ante cualquier duda o situación particular.
- Lleva ropa holgada y ligera, evitando en la medida de lo posible las prendas ajustadas. Ganarás en comodidad y agradecerás la ventilación que esto proporciona.
- Si quieres que la sombra te dé en la cara constantemente -lo cual será también muy agradecido por tus ojos- lleva un sombrero de ala ancha, una pamela o incluso un paraguas.
- Es muy importante que estés hidratado, aunque debes evitar las bebidas con alcohol o cafeína.
- No hagas grandes esfuerzos, sobre todo en los momentos más calurosos del día.
- Permanece en lugares que cuenten con aire acondicionado, que además reduce la humedad y favorece la respiración. Muchas personas prefieren utilizar el ventilador pero debes tener en cuenta que, en momentos de fuerte calor, esta opción es insuficiente y no llega a evitar un problema relacionado con las altas temperaturas.
- Utiliza formas alternativas para refrescarte como, por ejemplo, tumbarte con una toalla fría en la cara.
- Ponte protector solar si vas a estar en la calle. Recuerda que el sol también impacta sobre tu piel aunque vayas en el coche y que debes ponértelo cada 2 horas, sobre todo si te bañas o sudas.
Algunos cuidados específicos que necesitan los enfermos de hipertensión pulmonar en verano
Aunque te recordamos -de nuevo- que cada caso es particular y que siempre hay que atender los consejos e instrucciones del doctor que trata a cada paciente, compartimos contigo algunos consejos concretos relacionados con el calor en los enfermos de hipertensión pulmonar:
- Muchos medicamentos son sensibles al calor y a la luz, por lo que se pueden estropear. Mantenlos en un lugar fresco, no los dejes en el coche y presta un cuidado especial en el caso del Epoprostenol.
- Es muy aconsejable, sobre todo para las personas que sudan bastante, que las prendas de ropa permanezcan secas en todo momento.
- Ten cuidado con los diuréticos durante las épocas calurosas, ya que pueden llegar a favorecer la deshidratación. Contacta con tu especialista si sudas en exceso, has perdido bastante peso o te baja la presión sanguínea.
- Algunos medicamentos que tratan la hipertensión pulmonar aumentan el riesgo de sufrir quemaduras solares, por lo que debes evitar la exposición continua a los rayos y ponerte suficiente protección.
(Fuente: Pulmonary Hypertension Association)
Esperamos que estas recomendaciones relacionadas con los efectos del calor en los enfermos de hipertensión pulmonar te hayan sido de utilidad. Si quieres más información, podrás encontrarla aquí.